Los niños con Trastorno del Espectro del Autismo parecen ser más torpes, en cuanto a habilidad motriz, que otros niños. A esta torpeza motora se le denomina dispraxia.
¿Qué significa que un niño con autismo presente dispraxia?
Es habitual observar a niños de diferentes edades con Trastorno del Espectro del Autismo desempeñar tareas motoras con menor coordinación que niños con desarrollo neurotípico. Debemos apartar la palabra torpeza y hablar de dispraxia. Cada vez encontramos más trabajos científicos que estudian las habilidades motrices de las personas con TEA. Sin embargo, todavía no está claro si esta dispraxia es igual o diferente a la que presentan los niños con el llamado Trastorno del Desarrollo de la Coordinación.
¿Cuáles son las dificultades motrices que pueden presentar?
Estas dificultades incluyen, de forma global, la afectación de la coordinación de miembros y cuerpo, el equilibrio y la marcha, así como dificultades en la motricidad fina. Esto repercute negativamente en las dificultades que ya presentan en otras áreas, especialmente en la comunicación y en la socialización.
Debemos tener en cuenta que las habilidades comunicativas tienen una naturaleza motora y, teniendo en cuenta que las personas con TEA tienen dificultades para comunicarse, no es extraño encontrar un déficit en este aspecto.
Por otra parte, un niño pequeño necesita explorar su entorno para favorecer su aprendizaje y desarrollo. Si a una menor intención exploratoria le sumamos falta de fuerza para mantener la postura o para moverse, podemos entender cómo esta dificultad motora repercute negativamente en el desarrollo del niño con TEA. También deberemos tener en cuenta la motricidad de cabeza y cuello para orientarse hacia los diferentes estímulos, así como la coordinación ojo-mano para señalar y comunicarse con otros.
Todo ello parece tener relación con el retraso en la adquisición de los hitos motores que muchos niños con TEA presentan y que puede ser un marcador de detección precoz. Pero no quiere decir que sea la causa primaria de las características y dificultades que presentan las personas con TEA.
De forma más explícita, se ha descrito que los niños con TEA presentan alteraciones significativas en:
- Habilidades motoras gruesas como:
- coordinación bilateral
- Coordinación visuo-motora: coger un balón
- Equilibrio
- Habilidades motoras finas como:
- Escribir
- Dibujar o copiar
- Destreza manual con o sin velocidad
¿Cuál es el origen de estas dificultades?
Todavía no está claro cuál es el origen de la dispraxia en los niños con TEA, al igual que todavía no está claros cuáles son los mecanismos por los que se presentan el resto de características del autismo. No obstante, hay diversas hipótesis resultantes de diferentes trabajos.
Por un lado, se ha hipotetizado sobre la relación de una menor fijación visual del niño con TEA a la hora de poder interpretar y después imitar un patrón de movimiento. Este déficit en la fijación visual repercutiría en un el tono muscular que, a su vez, estaría relacionado con las alteraciones del sistema propioceptivo y su impacto sobre el equilibrio, control postural e imitación gestual.
También, se hipotetiza acerca de alteraciones en la lateralidad, considerándolo como una afectación interhemisférica, cuya implicación subcortical influiría en las estructuras corticales. Esta hipótesis, entre otros factores, se extrae de la observación de un mayor número de personas zurdas o ambidestras entre la población con TEA comparada con sus iguales.
En cualquier caso, estudios que han analizado la estructura cerebral sugieren que las dificultades motrices de los niños con TEA parecen ser más globales que las de los niños que, exclusivamente, presentan un Trastorno del Desarrollo de la Coordinación. Estas dificultades afectarían a la planificación motora y a la programación del gesto, repercutiendo a una red cerebral más amplia en combinación con la función ejecutiva del prefrontal. Así mismo, se incluiría al cerebelo, puesto que parece haber un menor volumen de células de Purkinje, lo que sugiere anomalías en la conectividad entre el cerebelo y regiones frontales y parietales.
¿Cómo repercute la dispraxia?
Por una parte, como ya hemos comentado, va a afectar al desarrollo tanto de las habilidades motrices como del resto de hitos del neurodesarrollo por esa menor movilidad, interacción con el entorno, exploración, etc.
Por otra parte, va a repercutir en la socialización con los iguales, puesto que van a tener mayores dificultades para jugar y moverse. Esto redundará en un mayor aislamiento social debido a la inactividad y un menor ejercicio físico.
¿Pero, cuánto afecta la dispraxia a los niños con TEA?
Pues parece que bastante. Un trabajo publicado en 2020 estimaba que un 86,9% de los niños con TEA tenía riesgo de afectación motora. Sin embargo, sólo el 15,1% había recibido el diagnóstico comórbido de Trastorno del Desarrollo de la Coordinación, y únicamente el 31,6% estaba recibiendo fisioterapia para ello.
En este trabajo sugieren que el período comprendido hasta los 7 años parece ser crítico a la hora de entrenar y mejorar las habilidades motrices con fisioterapia y/o terapia ocupacional. No obstante, esta atención más específica sobre el movimiento, podría ser un impulso para el desarrollo de las competencias comunicativas y sociales.
La literatura científica parece respaldar la presencia de la fisioterapia no sólo para la detección precoz del TEA, sino también para abordar, junto con terapia ocupacional, la dispraxia específica, y diferenciada del Trastorno del Desarrollo de la Coordinación, que muy probablemente presenten los niños con TEA.
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*Las actividades grupales se encuentran suspendidas debido a las medidas de seguridad e higiene preventivas en el marco de la emergencia sanitaria por el COVID19
Fuentes consultadas:
- Anjana Narayan Bhat, Is Motor Impairment in Autism Spectrum Disorder Distinct From Developmental Coordination Disorder? A Report From the SPARK Study, Physical Therapy, Volume 100, Issue 4, April 2020, Pages 633–644
- (2019) Nature of motor impairments in autism spectrum disorder: A comparison with developmental coordination disorder, Journal of Clinical and Experimental Neuropsychology, 41:1, 1-14
- Dziuk MA, Larson JCG, Apostu A, Mahone EM, Denckla MB, Mostofsky SH. Dyspraxia in autism: association with motor, social, and communicative deficits. Developmental Medicine & Child Neurology. 2007;49(10):734-9.